Suiza, Austria, Liechtenstein y Regiones Alpinas

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Suiza

Introducción

País en el corazón de la Europa Central, esencialmente alpino. Limita al sur con Italia, al este con Austria, Liechtenstein e Italia, al oeste con Francia y al norte con la República Federal de Alemania.
Capital federal: Berna.
Todo el territorio, el de más elevada altitud media de Europa, está dominado por la gran Cordillera Alpina y, en menor parte, al oeste, por la Cadena del Jura, creando así una sucesión de elevadísimos picos, glaciares, macizos, valles y lagos.
Clima: de montaña continental, con infinidad de variantes y microclimas y precipitaciones abundantes, bajo forma de nieve en buena parte del invierno. Los caracteres de relieve y clima hacen de Suiza un país muy atractivo para el turismo.
Tª media en la ciudad de Zurich entre 0º-1º en los meses de invierno y de 18º-20º en los de verano.

Recursos Turísticos

Entre los naturales están todos los que ofrece la alta montaña: estancias de veraneo en la estación climática más benigna, senderismo, alpinismo, contemplación de espectaculares paisajes, glaciares (como el del Ródano), esquí, etc.
El esquí se practica en estaciones de reducido tamaño, muchas de ellas entre las pioneras, y próximas a núcleos de población tradicionales. Destacan: las de Davos, Saint Moritz, Klosters, etc. en el Cantón de los Grisones. Los centros de esquí más renombrados y con un intenso turismo estival son: Gstaad y Grindelwald en el Oberland; Zermatt en las inmediaciones del Matterhorn (o Cervino), la montaña más hermosa y reproducida de Suiza.
Especial atractivo en Suiza tienen también los lagos. Los grandes lagos, como el de Constanza, Cuatro Cantones, Ginebra o Lugano, atraen un elevado nº de turistas por sus condiciones climáticas y por las actividades que permiten desarrollar, como los paseos turísticos en barco.
Numerosos balnearios, muy frecuentados, como el de Leukerbad.
Las cascadas del Rhin en Schaffhausen son espectaculares.
Recursos culturales los propios de las ciudades de arte e históricas, como Berna, Lausana, Zurich, Lucerna o Ginebra:
  • Berna: Museo de Bellas Artes. Plano medieval intacto.
  • Zurich: es la ciudad romana de Turicum, fundada en el 15 a.C. Es una de las más importantes capitales de arte y cultura. Catedral, Ayuntamiento, Museos, como el Nacional Suizo y el de Bellas Artes. La Bahnhofstrasse está plagada de comercios de superlujo mientras que la ciudad vieja conserva casi intactas sus callejuelas medievales.
  • Lucerna mantiene intacto su núcleo medieval, con sus torres, campanarios y sus puentes, uno de ellos cubierto.
  • Ginebra es conocida, aparte de por ser sede de muy importantes organismos de las Naciones Unidas, por su Chorro de Agua (Jet d’Eau) y sus parques. En el centro histórico destacan la catedral románico-gótica, el Ayuntamiento, la Casa Tavel (de 1303), varios palacios renacentistas y los Museos de Arte e Historia y el de Historia Natural, el más importante de Europa.
Innumerables castillos, como el de Chillon, en Montreux.

Austria

Introducción

País de la UE, en el corazón de la Europa Alpina y de la Europa Central. Limita al sur con Italia y con Eslovenia, al oeste con Suiza y Liechtenstein, al este con la República Eslovaca y con Hungría, al norte y oeste con la República Federal Alemana y al norte con la República Checa.
Capital: Viena.
La gran Cordillera Alpina, con sus agrestes montañas, sus glaciares, sus valles, etc. ocupa más del 70% del territorio.
Clima: templado continental puro, pero con elementos puramente alpinos en los territorios de mayores altitudes, con Tª de -11º en enero y de 15º en julio. Húmedo siempre, recoge las mayores cantidades de precipitación en la estación estival.
En Viena, las Tª medias mensuales en los meses de invierno oscilan entre -1º y 1º, y entre 17º y 18º en los de verano, lo que resalta la marcada frialdad de los inviernos y la suavidad térmica de los veranos.

Recursos Turísticos

Naturales

Los propios de estos medios geográficos: alpinismo, senderismo, contemplación de grandiosos paisajes montañosos con sus bosques, sus glaciares (los de los Altos Taurus o del Wildspitze), sus lagos, etc., deportes de invierno, en especial esquí. Balnearios, como el de Baden, próximo a Viena, el de Bad Hall en la Alta Austria, o el de Badgastein.
Austria fue país pionero en esquí y actualmente cuenta con equipamientos para esquiar incluso en verano. Es el recurso más importante. Se practica en estaciones de larga tradición y de no grandes dimensiones. Se debe a que ya inició esta actividad en el s. XVIII, con definitivo desarrollo en el s. XIX. Esto explica la fama tradicional de estaciones como Semmering y de las, más pequeñas, de Lermoos o Seefeld. La máxima actividad y los más numerosos equipamientos están en el Tirol (con estaciones como las de Kitzbühel, Alpbach o Saalbach) y en Carintia. En toda Austria hay más de 4.000 estaciones de esquí.

Culturales

Procedentes de su densa historia. Se manifiestan sobre todo en Viena, en Innsbruck (Tirol) y en Salzburgo. En Salzburgo sobresalen sus monumentales conjuntos arquitectónicos y la Kollegienkirche. Es mundialmente famosa por su Festival Internacional de Música.
Todo el país está sembrado de ciudades de rancio sabor medieval y de castillos. El barroco alcanza cotas inimaginables por su colorismo y luminosidad, como la Abadía benedictina de Melk.

Viena

Dada su situación geográfica, es muy importante turísticamente por ser punto de partida para las visitas a Budapest, Praga, Munich, Salzburgo, etc.
Sus orígenes se ocultan en la noche de los tiempos, estando ya documentada en su época celta. Posteriormente fue un campamento romano y, no es hasta el s. XVIII cuando se convierte en una auténtica capital, política y cultural, especialmente musical.
El casco histórico de Viena, en plano medieval, se resuelve en un laberinto de estrechas calles, pasajes, callejas y patios. Ocupado frecuentemente por vendedores ambulantes, saltimbanquis, músicos, etc. El coche de caballos es el mejor medio para recorrerlo. En el interior se encuentra la Catedral de San Esteban y su esbelta torre de 138 m., gótica en su mayor parte, puesto que sólo las torres de los Paganos y la puerta de los Gigantes son románicas.
Visitas ineludibles pueden ser: el Hofburg, o barrio imperial, con varios palacios, oficinas, legaciones diplomáticas, cafés, tiendas de lujo, etc. Pero el Hofburg, barroco y neoclásico, destaca esencialmente por los museos, los Palacios Imperiales, entre los que destaca el de Amalienburg, las iglesias, las oficinas del Presidente de la República, la Escuela de Equitación o la Biblioteca Nacional, así como por la Cámara del Tesoro, con las joyas imperiales.
Entre los varios Museos vieneses es necesario citar el de Historia del Arte, con las colecciones de los emperadores austríacos. En él hay pinturas de primera línea, escultura egipcia, antigüedades del Próximo Oriente y de Grecia y Roma, etc. Otro museo destacable es el de Historia Natural, en el que se conservan nada menos que la Venus de Willendorf (de hace 250 siglos) y el Carro de Hallstatt (de la Edad del Hierro).
Ciudad cultural, dispone del neorrenacentista Teatro de la Ópera, con espectaculares escalinata principal y vestíbulo. El más famoso Teatro con representaciones en lengua alemana es el Burgtheater, con sus lujosos Auditorio, escalinatas y fachada.
El barroco vienés es especialmente rico, luminoso y, como se ha apuntado, colorista. Su mejor representante es la iglesia Karls (karlskirche), bajo una descomunal cúpula, un más que lujoso altar mayor y un pórtico imitador del arte clásico.
Palacios descollantes en Viena son:
  1. El de Belvedere, que, en realidad, son dos residencias principescas separadas por un amplio jardín, arquitertónicamente bellísimos, con colecciones de arte y con una inimaginable Sala de los Espejos;
  2. El de Schönbrunn, barroco, con amplísimos jardines embellecidos por estatuas, con un zoológico, un invernadero de plantas exóticas y un museo de carrozas
El Prater es el parque pulmón de la ciudad, con su antigua y conocida noria.
En los alrededores, el Bosque Vienés es un conglomerado de viñas entre colinas, carreteras panorámicas y abundante barroco. En él se emplaza el Pabellón de Caza de Mayerling.

Liechtenstein

Introducción

Es un pequeño país alpino de 160 Km2, situado en el corazón de Europa, entre Suiza y Austria. Dividido en dos regiones: las tierras altas y las bajas. En las Altas se encuentra el monte Grauspitz de 2.600 m.
Geográficamente, el principado está constituido por 3 valles por los que circulan 3 ríos: el Samina, el Rhin y el Ill. La llanura de inundación del Rhin, junto con las otras dos corrientes conforman un triangulo llano que permite practicar la agricultura.
Clima: A pesar de ser una región alpina, gracias a los vientos cálidos procedentes del Sur– efecto Föhn- no es extremo. Las precipitaciones anuales oscilan entre los 900 y los 1200 mm, aunque en las partes altas aumentan hasta los 1900 y se producen en forma de nieve. Las Tª en invierno tienen de media en torno a –15º C; en verano sobre los 20º-28º, dependiendo de la altitud.
Aunque no tiene ninguna religión oficial, la mayoría de su población es católica, el 80% de la misma. La lengua oficial es el alemán y la moneda el franco suizo. Una de las principales actividades económica es el turismo.
Capital: Vaduz : donde se encuentra el palacio del monarca. En sus orígenes fue un condado, el condado de Vaduz, que fue elevado a la categoría de principado en el siglo XVIII. La forma de gobierno en la actualidad es la monarquía hereditaria.

Recursos Culturales

El principal atractivo cultural se encuentra en el Engländerhaus, en el centro de Vaduz, donde se exhibe la colección de arte del principado con importantes obras de pintura flamenca y alemana del siglo XVII. El Kunstmuseum con colecciones de arte contemporáneo, el Mº del sello, el Mº Walser Heritage, con una amplia colección de objetos de los Walsers, el pueblo que, procedente del cantón suizo de Valais, se asentó en Triesenberg en el siglo XIII. Además, en Vaduz, tb está el Castillo del Príncipe, que no es visitable y la Catedral.

Otros Recursos Turísticos

En la ciudad de Nendeln se encuentran las excavaciones de una villa romana datada en los años 150 al 300 d.C. En Triesenberg , además de las bellas vistas sobre el Rhin, está la iglesia de San José de París, que data del siglo XVIII. En Feldkirchen, en el área de Velden am Wörther en la frontera con Austria, hay edificios de estilo medieval además de un castillo del siglo XII, el de Schattenburg, convertido en Museo.
Gracias a sus características territoriales es un lugar idóneo para practicar el turismo verde o de naturaleza y el deportivo; se pueden practicar deportes como el senderismo. Las localidades de Malbun y Steg son los puntos de partida para una preciosa ruta de montaña.
Existen rutas para montar en bicicleta, una de las más populares es la señalizada como Biking y recorre 90 km a lo largo de la orilla del Rhin. También hay rutas para bicicleta con mayor dificultad, diseñadas para los amantes de la Mountain Bike. Una de las más populares es la que va de Schaan a Gafadura, pasando por Planken. En el país también se puede practicar alpinismo.
En Steg , cerca de Triesenberg, además del senderismo se puede practicar ski de fondo; también tiene, como atracción, un tobogán de nieve para saltos.
En Malbun, a más de 1.550 m está la estación de ski del Principado, que cuenta con pistas de tres categorías; para principiantes, intermedias y avanzadas, pistas de snow-board y áreas de ski de fondo.

Gastronomía

Las comidas locales están muy influenciadas por los países vecinos; las sopas son platos muy populares al igual que los quesos alpinos de buena calidad. El Rebel es una especie de masa que se realiza con harina de maíz cocida con leche, agua y sal. También son populares los purés de baya de saúco, y las Rôschti : patatas preparadas en puré y fritas después. Entre los postres se encuentran el popular Käsknöpfle: especie de noodle relleno de queso bastante fuerte. Los vinos, a pesar de que se trata de tierras altas, son de buena calidad. Las viñas se pueden cultivar localmente, gracias al efecto Fon. En la localidad de Hofkellerei, se comercializan los vinos del mismo nombre elaborados en el viñedo de Herawingert, propiedad de la familia principesca.

Regiones Alpinas

Introducción

Los Alpes son el más sobresaliente conjunto montañoso de toda la Europa Central. Cubren en los territorios de Francia (arrancan en la Costa Azul), de Italia, de Eslovenia, de Alemania, de Suiza y de Austria (concluyen en Viena), una extensión superior al cuarto de millón de kilómetros cuadrados, sobre una longitud de 1200 Km. Entre inmensos picos, muchos superiores a los 4000 m., se abren valles, ocupados frecuentemente por glaciares (hay casi 3000), por morrenas y por lagos de los más heterogéneos tamaños.
Se podría hablar de clima alpino, aunque resulta imposible precisarlo, debido a que las distintas exposiciones y altitudes crean infinidad de matices y microclimas. Las exposiciones al sur se benefician algo de los flujos mediterráneos, mientras que las vertientes interiores registran las máximas cantidades de precipitación (entre 2000 y 3500 mm.) en verano y otoño. Nieves permanentes por encima de los 2.900 m. en las vertientes del sur y de 2300/2400m. en las expuestas al norte.
Los Alpes se abrieron al conocimiento exterior tras los estudios de Saussure, geógrafo de Ginebra, en el pico más alto del Sistema, el Mont Blanc (4.810m.), que escaló como pionero. Pronto la Cordillera se puso de moda y uno tras otro, a lo largo del s. XIX, fueron siendo coronados sus picos más altos: el francés Ecris (4.103 m.), el italiano Gran Paradiso (4.061 m.), los suizos Monte Rosa (4.638 m.), Matterhorn o Cervino (4.479 m.) y San Gotardo (3.198 m. ) y el austriaco Grossglockner (3.798 m.).
Ya entrado el s. XX se crean buenas infraestructuras de carreteras y ferrocarriles, algunos de cremallera, con lo que se facilitó el acceso a un constantemente creciente nº de alpinistas, excursionistas y esquiadores.
En el s. XXI la frecuentación turística es enorme, sobre todo para estancias de descanso en verano, en esta Cordillera hay más del 60 % de las estaciones de esquí del Mundo y en las que en la época dura hasta seis meses.
Económicamente la región se localiza en las inmediaciones de países densamente poblados, de altos niveles de renta y vacaciones pagadas, con las que enlaza por cómodas infraestructuras de comunicación.
Todos los recursos propios de las áreas de montaña se hallan aquí elevados a la máxima potencia: paisajes, bosques, glaciares, fuentes termales, lagos, etc.
En Suiza y Austria, países pioneros, y también en el área de los Dolomitas, las instalaciones de esquí son de pequeño o mediano tamaño, desarrolladas por los propios habitantes de la región. Por el contrario, en Francia las estaciones son de grandes dimensiones, del tipo integrado, a grandes altitudes, planeadas por empresarios externos a la zona.

Alpes Franceses

El turismo de nieve cuenta con numerosas y muy potentes instalaciones, como el área de Avoriaz, entre Suiza y Francia, con 650 Km. de pistas esquiables, situadas en tres valles intercomunicados.
El establecimiento clásico de alpinismo en Francia es Chamonix. Aquí se celebraron los primeros Juegos Olímpicos de Invierno, en 1.924, cuando aún no se conocía la figura del monitor de esquí. Actualmente aquí hay turistas activos, que esquían o caminan y los familiares, que se quedan en el hotel. Es, pues, en esta estación, un turismo de puesta en escena. En un principio no se concibió Chamonix como estación de esquí, pero, después, se equipó con remontes para alcanzan mayores alturas en las que poder esquiar.
La pista más larga del Mundo es la de Les Portes du Soleil, con iluminación para la práctica de esquí incluso por la noche. Otros centros turísticos importantes son: Tignes, Les Arcs, La Plagne, Val Thorens, Super Dévoluy, Isola 2000, Chamonix, Serre-Chevalier, Les Deux Alpes, Val d’Isère, etc.
Todas son estaciones a gran altitud, de grandes dimensiones y del tipo integrado.
No obstante, hay diferentes generaciones de estaciones de esquí:
  1. Estaciones de primera generación son las anteriores a la II Guerra Mundial, situadas entre 900 y 1.200 m, abundantes en la Alta Saboya. El ejemplo puede darlo Avoriaz. Son estaciones preparadas por los habitantes de los pueblos, por agricultores. Comenzaron como estaciones de verano y después se equiparon con remontes mecánicos (el primero fue una telesilla), a altitudes bastante modestas (Chamonix está a 1.030 m). Están rodeadas de bosques por lo que, para hacer pistas, hay que talar los árboles,
  2. Estaciones de segunda generación: los ejemplos pueden ser las estaciones de Isère, Couchevel o L´Alpe d`Huetz. La más grande es la de la Plagne. Se construyeron después de la Guerra, en los años 50, a mayores altitudes: unos 1.700 m. Aquí no había pueblos, como en el caso anterior, sino sólo chalets para el verano. Las estaciones están por encima del nivel del bosque y se construyeron directamente para ser estaciones de invierno, de esquí, pero no pensando en el alpinismo de verano. Las instalaciones fueron emprendidas por campesinos de los pueblos del entorno y por algunos bancos, con un gran desorden, sin plan director ninguno. Nada estaba organizado: ni siquiera había aparcamiento en los hoteles, por ejemplo.
  3. Estaciones de tercera generación, o Integradas. Los ejemplos pueden ser Tignes, Les Arcs o Val Thorens. Estas estaciones derivan de un plan de 1.959 pensado para que los franceses no se fueran a Suiza o a Austria a esquiar y para atraer clientes de Benelux, Inglaterra, Escandinavia, etc. Los promotores eran agentes de lugares externos, que tenían gran poder de decisión. Se localizan a altitudes mayores a 2.000 m lo que garantiza que la temporada sea más larga. La principal diferencia con las de segunda generación es que en éstas no hay más que un promotor (Banco de París, por ejemplo), quien hace absolutamente todo y es el único propietario del conjunto de la estación: alojamiento, remontes mecánicos, restaurantes, comercios, discotecas, etc. El Estado únicamente ha de construir las carreteras. La organización es muy minuciosa: por ejemplo, en Tignes se establece adecuación entre el número de camas y el número de esquiadores que pueden absorber a la hora de los remontes mecánicos. Este tipo de estaciones de tercera generación recibe el nombre de Fábricas de Esquí: no hay nadie en verano.
Por supuesto que en los Alpes Franceses es también abundante el turismo estival.

Alpes Alemanes

Estrictamente los Alpes Alemanes son Los Prealpes de Baviera, con un poco más de 250 Km. de largo, con anchuras máximas de 25 a 35 Km. Encontramos el punto más alto de Alemania, el Zugspitze, de 2.964 m.
La zona comenzó turisticamente como estancias de veraneo. En esta zona se sitúan los castillos del Rey Loco.
Las Olimpíadas en Garmisch-Partenkirchen (1.936) en las inmediaciones del Zugspitze, aumentaron la afluencia a las estaciones de esquí.
Los centros de esquí más destacados son: el de Garmisch-Partenkirchen y los de Berchtesgaden y Bad Raichenhall, los de Tagernsee, Füssen y Oberammergau (con sus famosas representaciones del Belén).
Numerosas estaciones balnearias, como las de Bad Füssing, Bad Wörishofen y Berchtesgaden.

Alpes Eslovenos

Se conocen geográficamente como Alpes Dináricos, esencialmente calizos. Sus montañas y mesetas se disponen paralelamente a la costa Adriática y enlazan con la cordillera Balcánica. Ocupan una extensión similar a la de los Alpes Alemanes.
Se trata de un área recreativa, de excursión y de descanso estival para los habitantes de la capital eslovena y de ciudades próximas de Austria y de Italia, actividades que se remontan al s. XIX.
Paisaje y recursos turísticos similares a los de las demás áreas alpinas, pero muy acumulativos territorialmente: numerosos picos realmente altos, lagos, valles y abundantes balnearios.
El esquí se ha potenciado fuertemente tras la independencia del país, habiéndose creado casi de la nada nuevas estaciones, siguiendo el modelo integrado francés. Por lo general, en las mismas localidades que las antiguas residencias de veraneo, es decir, en Kranjska Gora (la mayor y más importante de Eslovenia, perfectamente comunicada con la capital estatal), en Bled, en Bohinj y en Bovec.

Alpes Italianos

Cubren la totalidad de las áreas fronterizas de Italia, ocupando grandes extensiones.
Por razones climáticas, el nivel de las nieves perpetuas se sitúa a mayores cotas que en otros países, al igual que las Tª y la insolación son más elevadas y menor la duración del período esquiable.
Italia centra sus recursos en:
  • El alpinismo, en el valle de Aosta (próximo a Francia y a Suiza), en Cortina d’Ampezzo y en la región de los Dolomitas (vecina de Austria)
  • Los balnearios, no se ha desarrollado como debería, sobresalen centros como Crodo, San Pellegrino, Merano, Lurisia o Recoaro.
  • Las residencias de descanso estival
  • El senderismo
  • Los lagos, los más espectaculares lagos de origen glaciar de toda Europa. Fueron los primeros recursos turísticos en ser explotados en territorio italiano. Son áreas de descanso estival y, desde hace mucho tiempo, de práctica de deportes de tipo californiano. El más visitado es el de Garda, rodeado de numerosos núcleos turísticos. Otros, sorprendentemente bellos, importantes y bien equipados en infraestructuras turísticas, son los de Como, Lugano y Mayor.
  • Especialmente, el esquí, la actividad turística de desarrollo más tardío, pero la más practicada actualmente. 
Numerosas estaciones de esquí, se diferencian varias regiones: Piamonte, Valle de Aosta, Liguria Lombardía, Trentino, Véneto, etc.
Destacamos las siguientes estaciones:
  • En los límites con Francia sobresalen Limone Piamonte, Sestriere, Claviere y, especialmente, las del Valle de Aosta, en el marco de los más imponentes macizos, picos, glaciares y valles. Aquí destacan centros como Courmayeur (próximo al francés Chamonix) o Breuil-Cervinia. Un área importante también es la de los Prealpes Lombardos, muy bien equipada en infraestructuras altamente tecnificadas y utilizada preferentemente los fines de semana por los habitantes de Milán, Bérgamo, Brescia, etc. En el Trentino son famosas las estaciones de Madonna di Campiglio y otras, más recientes, fieles seguidoras del modelo francés de estación integrada.
  • Decir turismo de nieve en Italia es decir turismo en los Dolomitas, el sector de los Alpes más bonito y más conocido internacionalmente. Destacar, por su renombre, las estaciones, frecuentemente congestionadas, de Ortisei, Corvara y, sobre todo, Cortina d’Ampezzo, la más importante de todos los Dolomitas, de toda Italia y una de las principales del Mundo. Dispone de muchísimas y prolongadas pistas, remontes, etc. y de todo tipo de equipamientos. Al norte de los Dolomitas sobresalen estaciones como Sesto Pusteria o Plan de Corones.
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